Jorge Osorio Vargas [1 Desde la década de los años 80 del siglo pasado la educación de personas jóvenes y adultas (EPJA) viene experimentando un déficit histórico y un rezago significativo con relación a otras políticas educativas. El modelo “histórico” de la EPJA desarrollado desde los años 60 se basó en las políticas de integración social, modernización económica y de movilización social, promoviéndose como una dimensión clave de la participación comunitaria y política de la época. Bajo diversas modalidades, la alfabetización, la educación básica de adultos y los programas de capacitación para el trabajo sintonizaron con enfoques educativos participativos y una crítica a los sistemas escolares. La visión desescolarizante de la EPJA se nutría del pensamiento de intelectuales como Illich y Freire. En el caso de Freire su pensamiento educativo se manifestaba además en un movimiento de educación comunitaria con una importante dimensión política, tanto en los ámbitos rurales como urba
Jorge Osorio Vargas Enero 2023. La crisis global es una oportunidad para la configuración de nuevas formas de acciones colectivas en todo el planeta. El discurso que cruza transversalmente estas movilizaciones es la democratización del poder, de la economía, de la educación. Los educadores-as no son actores ausentes, a la inversa: junto a los estudiantes conforman una poderosa expresión ciudadana de carácter global. La educación y sus instituciones convencionales están en discusión de manera sustantiva. No sólo por un asunto de acceso y calidad a los servicios escolares, sino por su incapacidad para entregar nuevas respuestas a los cambios globales, y para orientar a las personas y sus comunidades hacia una sociedad justa y sustentable. En este contexto global, lo propio de la contribución de los movimientos emergentes de la educación de las personas jóvenes y adultas está siendo configurado por algunas c